¿Cómo ser tu propio jefe otorgando servicios?







Quizás se esté preguntando, "entonces, ¿qué es trabajar independientemente?" Trabajar por cuenta propia significa trabajar como una empresa independiente en lugar de ser empleado por otra persona. Los autónomos son autónomos y, a menudo, se los denomina contratistas independientes.

Los contratistas son contratados por otras empresas a tiempo parcial o a corto plazo, pero no reciben la misma compensación que los empleados a tiempo completo ni tienen el mismo nivel de compromiso con ninguna empresa en particular. Con el auge de la giga-economía, la gente habla de trabajar por cuenta propia más que nunca. Y eso se debe a que hay más trabajadores independientes hoy que nunca en la historia: un estudio de 2019 de Upwork y Freelancers Unión muestra que 57 millones de estadounidenses trabajaron por cuenta propia en 2019. Y según el mismo estudio, el 53% de los trabajadores de 18 a 22 años son autónomos.

¿Cómo funciona el trabajo como contratista?

Los contratistas aceptan pagos a cambio de proporcionar algún tipo de servicio. Ese acuerdo es generalmente a tiempo parcial o a corto plazo. Por ejemplo, si contrataba a un fotógrafo para que me tomara nuevas fotos en la cabeza, podría pagarle a un profesional independiente por esa sesión y eso sería el final. A veces, la gente paga a los trabajadores autónomos para que trabajen un número determinado de horas a la semana o al mes. Ese arreglo a menudo se denomina "anticipo". Un anticipo se refiere a cuando usted retiene los servicios o el derecho al tiempo de alguien. Muchos profesionales legales trabajan en el anticipo. Cada mes, facturan una cantidad determinada de tiempo al cliente, independientemente de si ese tiempo completo se utiliza o no. Es realmente una de las formas más simples y puras de emprendimiento: el profesional independiente proporciona un servicio o resultado específico y el comprador le paga una tarifa directamente.

Trabajar independientemente proporciona mucha flexibilidad y control al individuo. La mayoría de los autónomos eligen sus propias horas, el trabajo que hacen, los clientes con los que trabajan e incluso pueden trabajar de forma remota. Trabajar como autónomo también es una manera de espíritu empresarial, lo que significa que el trabajador autónomo tiene el control total de su potencial de ingresos. Los autónomos no están limitados a un salario, por lo que pueden ganar tanto como pueden facturar a sus clientes. Y como autónomo, eres tu propio jefe. Trabajar como autónomo también ofrece mucha variedad en el tipo de trabajo que puede hacer. Si eres alguien con muchos intereses y te atrae probar cosas nuevas, el trabajo independiente puede ayudarte a explorar todo tipo de proyectos e industrias. Históricamente, el trabajo independiente no es algo que la gente suele hacer para siempre. O contratan a otros trabajadores autónomos o empleados para crear una agencia completa, crean sus propios productos para reemplazar sus ingresos como autónomos o vuelven a trabajar a tiempo completo. Trabajar como autónomo proporciona la flexibilidad que muchas personas desean para determinar su próximo paso profesional.

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